“Los inmigrantes tienen los mismos problemas sanitarios que los autóctonos”
Gustavo Franco Cruz t.l.
orge Soler (Lleida, 1975) es médico de familia y profesor de Medicina de la Universidad de Lleida. Su inquietud por la problemática social lo ha motivado a investigar sobre la salud de los inmigrantes que viven en España. Su tesis doctoral del 2007 “Inmigración: estado de salud, incapacidades laborales, farmacia y utilización de los servicios sanitarios”, fue premiada por el Consejo Económico y Social. Además de haber realizado varias publicaciones en revistas médicas sobre el tema, participa activamente en investigaciones destinadas a abordar las desigualdades sociales y los grupos de exclusión.
Es miembro del Consejo de Redacción de la Revista Oficial del Colegio de Médicos de Lleida y representante de la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria. Antes de la presentación de su libro “¿Porqué lloran los inmigrantes?”, este miércoles 14 de abril en la librería Bertrand de Barcelona (Rambla de Catalunya, 37), el autor dio esta entrevista en exclusiva para Tribuna Latina.
¿Porqué lloran los inmigrantes?
Lloran por muchos motivos, como la emoción de los objetivos cumplidos del proyectio migratorio. A veces también porque esas expectativas no se cumplen. Por desgracia, algunos no lo realizan por la coyuntura económica.
¿Es un ensayo, una investigación, una novela?
Es un ensayo científico dirigido al gran público, que nada tiene que ver con la migración o con la medicina, pero que tiene ganas de saber cómo está la gente. No es mi opinión, es una manera sencilla y amena, de explicar esta situación del mundo de la sandiad. Es la dolenica como un mensaje.
¿Haber seleccionado este tema también es una forma de opinón?
Es una opinión elaborada porque hay muchos estudios científicos sobre los inmigrantes. Más de 500 citas hay en el libro. Muchas están inglés, en un lenguaje técnico, para la comunidad científica. Yo lo que he hecho es interpretar y traducir esta información.
¿Qué enfermedades traen los inmigrantes?
Lo que acabo diciendo es que no traen absolutamente ninguna enfermedad. Tienen los mismos problemas sanitarios que los autóctonos. Vienen muy sanos, porque el que decide emigrar lo hace porque se siente fuerte y sano. Es un gran paso venir a un país lejano, porque la persona está en condiciones de hacerlo. No por el hecho de ser inmigrante tendrán más enfermedades aquí, sino por el grado social, laboral, etcétera.
¿Se corre algún peligro conviviendo con ellos?
Ninguno. Durante mucho tiempo en algunos medios sensacionalistas, les encantaba hablar de las enfermedades tropicales como un gran descubrimiento. Pero no hay ningún riesgo. Esto ocurrió con la malaria, el paludismo y el dengue. Se trata de un efecto caos al ver al supermédico de la televisión.
¿Sufren las mujeres extranjeras un mayor maltrato que las autóctonas?
Muchísimo más. En España la violencia doméstica no es una novedad, ha sido siemnpre un problema oculto. Pero mucho peor en ciertas mujeres inmigrantes, porque no tienen el soporte, los amigos. En cambio viven en una condición laboral de debilidad, de mayor dependencia. Lo llamo el efecto paracaidas, porque son dependientes como las españolas de los años 50.
¿Ha tomado en cuenta el Estudio de la Salud en la Población Inmigrante de la Agencia de Salud Pública de Barcelona?
Sí, y muchas más referencias. Lo he usado mucho, porque es la parte de salida para decir “la inmigración no trae todos los males”. Tenemos que tener claro que hay que tomar en cuenta a los inmigrantes en los estudios, porque son una parte importante de la población.
¿Otras fuentes para argumentar que son sanitariamente iguales que los autóctonos?
Elegir uno me es difícil. Lo inicié con mi tesis, cuando demostré que los inmigrantes son iguales. Pero que hacen un mayor uso de las urgencias, a la vez que tienen menos bajas y de menor duración. También gastan mucho menos en farmacias.
¿El tuyo es un libro científico o social?
Es una mezcla de la ciencia explicado para la sociedad.
orge Soler (Lleida, 1975) es médico de familia y profesor de Medicina de la Universidad de Lleida. Su inquietud por la problemática social lo ha motivado a investigar sobre la salud de los inmigrantes que viven en España. Su tesis doctoral del 2007 “Inmigración: estado de salud, incapacidades laborales, farmacia y utilización de los servicios sanitarios”, fue premiada por el Consejo Económico y Social. Además de haber realizado varias publicaciones en revistas médicas sobre el tema, participa activamente en investigaciones destinadas a abordar las desigualdades sociales y los grupos de exclusión.
Es miembro del Consejo de Redacción de la Revista Oficial del Colegio de Médicos de Lleida y representante de la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria. Antes de la presentación de su libro “¿Porqué lloran los inmigrantes?”, este miércoles 14 de abril en la librería Bertrand de Barcelona (Rambla de Catalunya, 37), el autor dio esta entrevista en exclusiva para Tribuna Latina.
¿Porqué lloran los inmigrantes?
Lloran por muchos motivos, como la emoción de los objetivos cumplidos del proyectio migratorio. A veces también porque esas expectativas no se cumplen. Por desgracia, algunos no lo realizan por la coyuntura económica.
¿Es un ensayo, una investigación, una novela?
Es un ensayo científico dirigido al gran público, que nada tiene que ver con la migración o con la medicina, pero que tiene ganas de saber cómo está la gente. No es mi opinión, es una manera sencilla y amena, de explicar esta situación del mundo de la sandiad. Es la dolenica como un mensaje.
¿Haber seleccionado este tema también es una forma de opinón?
Es una opinión elaborada porque hay muchos estudios científicos sobre los inmigrantes. Más de 500 citas hay en el libro. Muchas están inglés, en un lenguaje técnico, para la comunidad científica. Yo lo que he hecho es interpretar y traducir esta información.
¿Qué enfermedades traen los inmigrantes?
Lo que acabo diciendo es que no traen absolutamente ninguna enfermedad. Tienen los mismos problemas sanitarios que los autóctonos. Vienen muy sanos, porque el que decide emigrar lo hace porque se siente fuerte y sano. Es un gran paso venir a un país lejano, porque la persona está en condiciones de hacerlo. No por el hecho de ser inmigrante tendrán más enfermedades aquí, sino por el grado social, laboral, etcétera.
¿Se corre algún peligro conviviendo con ellos?
Ninguno. Durante mucho tiempo en algunos medios sensacionalistas, les encantaba hablar de las enfermedades tropicales como un gran descubrimiento. Pero no hay ningún riesgo. Esto ocurrió con la malaria, el paludismo y el dengue. Se trata de un efecto caos al ver al supermédico de la televisión.
¿Sufren las mujeres extranjeras un mayor maltrato que las autóctonas?
Muchísimo más. En España la violencia doméstica no es una novedad, ha sido siemnpre un problema oculto. Pero mucho peor en ciertas mujeres inmigrantes, porque no tienen el soporte, los amigos. En cambio viven en una condición laboral de debilidad, de mayor dependencia. Lo llamo el efecto paracaidas, porque son dependientes como las españolas de los años 50.
¿Ha tomado en cuenta el Estudio de la Salud en la Población Inmigrante de la Agencia de Salud Pública de Barcelona?
Sí, y muchas más referencias. Lo he usado mucho, porque es la parte de salida para decir “la inmigración no trae todos los males”. Tenemos que tener claro que hay que tomar en cuenta a los inmigrantes en los estudios, porque son una parte importante de la población.
¿Otras fuentes para argumentar que son sanitariamente iguales que los autóctonos?
Elegir uno me es difícil. Lo inicié con mi tesis, cuando demostré que los inmigrantes son iguales. Pero que hacen un mayor uso de las urgencias, a la vez que tienen menos bajas y de menor duración. También gastan mucho menos en farmacias.
¿El tuyo es un libro científico o social?
Es una mezcla de la ciencia explicado para la sociedad.
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