El Gobierno impulsa el Programa de Regreso Voluntario de personas inmigradas desde Catalunya
El Gobierno ha aprobado hoy destinar 500.000 euros a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) para reforzar el Programa de Regreso Voluntario de personas inmigradas desde Catalunya a los países de origen, en el marco de un convenio de colaboración con este organismo que se remonta al año 2006. Esta cifra representa un incremento de 200.000 euros respecto al año 2009, hecho que permitirá desarrollar esta actuación, especialmente en un contexto de crisis económica como el actual y teniendo en cuenta el aumento de la demanda.
El objetivo de este programa es ofrecer una salida digna a aquellas personas extranjeras que se encuentren en riesgo de exclusión social o que sufren un alto grado vulnerabilidad. Personas que desean volver a su país, pero que no disponen de suficientes recursos ni oportunidades para hacer efectivo el viaje. En este sentido, las personas beneficiarias obtienen asesoramiento para tramitar el retorno, la financiación del billete aéreo y, en función de los casos, una ayuda económica para su reincorporación al país de origen.
Ayuda tanta para regulares como irregulares
Se pueden acoger personas extranjeras en situación regular e irregular, cónyuge o pareja y otros familiares directos. También personas solicitantes de asilo con respuesta denegada y personas refugiadas que quieran volver a su país de origen porque las circunstancias hayan cambiado. Quedan excluidas las personas con alguna nacionalidad de los países que integran la Unión Europea, los nacionales de terceros países que dispongan de tarjeta de residencia comunitaria y las personas con nacionalidad del Marruecos, Argelia y Túnez por la proximidad geográfica con Catalunya. Tampoco permite el regreso en países en conflicto armado ni a menores de edad no acompañados.
Para que se apruebe la solicitud hay que demostrar un periodo mínimo de residencia continuada en Catalunya de seis meses y volver a la Administración competente la documentación oficial que se haya obtenido durante la estancia en Catalunya, como la tarjeta sanitaria y, si es el caso, la tarjeta de residencia.
Las personas interesadas a acogerse a este programa tienen que dirigirse a los servicios sociales de su ayuntamiento o a alguna ONG con trabajadores sociales colegiados, como por ejemplo Càritas. Una vez rellenada la solicitud, la Secretaría para la Inmigración se encargará de gestionarla y enviarla a la sede de la OIM en Madrid, que se pronunciará aproximadamente en el plazo de un mes y medio.
El objetivo de este programa es ofrecer una salida digna a aquellas personas extranjeras que se encuentren en riesgo de exclusión social o que sufren un alto grado vulnerabilidad. Personas que desean volver a su país, pero que no disponen de suficientes recursos ni oportunidades para hacer efectivo el viaje. En este sentido, las personas beneficiarias obtienen asesoramiento para tramitar el retorno, la financiación del billete aéreo y, en función de los casos, una ayuda económica para su reincorporación al país de origen.
Ayuda tanta para regulares como irregulares
Se pueden acoger personas extranjeras en situación regular e irregular, cónyuge o pareja y otros familiares directos. También personas solicitantes de asilo con respuesta denegada y personas refugiadas que quieran volver a su país de origen porque las circunstancias hayan cambiado. Quedan excluidas las personas con alguna nacionalidad de los países que integran la Unión Europea, los nacionales de terceros países que dispongan de tarjeta de residencia comunitaria y las personas con nacionalidad del Marruecos, Argelia y Túnez por la proximidad geográfica con Catalunya. Tampoco permite el regreso en países en conflicto armado ni a menores de edad no acompañados.
Para que se apruebe la solicitud hay que demostrar un periodo mínimo de residencia continuada en Catalunya de seis meses y volver a la Administración competente la documentación oficial que se haya obtenido durante la estancia en Catalunya, como la tarjeta sanitaria y, si es el caso, la tarjeta de residencia.
Las personas interesadas a acogerse a este programa tienen que dirigirse a los servicios sociales de su ayuntamiento o a alguna ONG con trabajadores sociales colegiados, como por ejemplo Càritas. Una vez rellenada la solicitud, la Secretaría para la Inmigración se encargará de gestionarla y enviarla a la sede de la OIM en Madrid, que se pronunciará aproximadamente en el plazo de un mes y medio.
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