"la policía nos quita la dignidad"

En muchos sitios de Cuatro Caminos se pueden ver pintadas donde se reclama requisas para todos. (Foto: Eduardo León)

Los vecinos de Topete exigen no más atropellos por parte de los Municipales y piden que los cacheos sean para todos

Hey chico, ¿tú quién eres? El barrio está caliente. Después de que mataron a ‘Luisito’ esto ya no es lo mismo. Estamos alerta. No estamos en contra de nadie; aquí vivimos, aquí están nuestros amigos. Aquí no hay racismo, no hay xenofobia. Algunos medios han manifestado que aquí los españoles y los dominicanos no se llevan bien. Eso es mentira”.

“Hey tú, apaga la cámara”, grita otro. Nuestro reportero gráfico no hace caso a la amenaza. Inmediatamente un grupo de jóvenes rodea al periodista de Latino y le piden que se identifique. Éste no lo duda.

“Ya no confiamos en nadie. La policía viene aquí y nos cachea, nos desnuda delante de nuestros hijos. Eso está prohibido. Desde antes del crimen de ‘Luisito’ esto viene ocurriendo. Cuatro Caminos no es un barrio de narcos. Aquí no se vende droga. Los que vivimos aquí somos gente trabajadora, con familia”.

Un español que lleva más de quince años viviendo en el barrio interviene en la conversación y dice que aquí todos se conocen. “¿Para dónde vamos a coger? La policía apenas ve a un grupo de jóvenes se acerca, les pide la identificación y luego proceden a requisarlo de forma desproporcionada. No es legal que te metan en un local para ver si posees droga. Si quieren saber más de ti que te lleven a la comisaría. Esta gente aquí no vino en patera. Vinieron en avión. La mayoría tienen la nacionalidad española, pero como son negritos los acosan, los persiguen. No hay ningún barrio en Madrid donde la presencia policial sea tan intensa”.

En ese preciso momento del diálogo una patrulla de la policía pasa. Aminoran la velocidad y nos miran con recelo.

Otro joven los encara, los mira. “Ahí los tienes. Nada de lo que te decimos es mentira. Siempre van con una chulería. Los más arrogantes están en la Municipal. Te observan con odio, como si todos los de aquí fuéramos delincuentes”.

MUCHA RABIA

Hay una rabia contenida en el sector. Un joven, que no quiso dar su nombre, manifestó que lo que más le produce dolor es que el día del asesinato de ‘Luisito’, el sujeto que le disparó estuvo merodeando desde la cinco de la tarde hasta las diez de la noche.

“Daba vueltas aquí y allá. Todo el mundo lo vio, yo lo vi. ¿Y por qué la policía no hizo nada?, ¿por qué a él no lo cachearon? A nosotros sí nos joden, nos quitan la dignidad. Dios sabe que el único pecado nuestro es vivir en un país que no es el nuestro. Aquí los racistas no son los dominicanos, son los policías. Ellos nos ven como escoria y va a llegar un día en que no vamos a soportar más atropellos. ‘Luisito’ murió, pero nosotros estamos vivos y vamos a luchar por nuestros derechos. Nadie nos va a sacar de nuestro barrio”.