Inmigración: entre el silencio y la propaganda, la realidad
Las entidades del país que durante todo el año trabajan para mejorar las condiciones de vida de los inmigrantes y para mejorar la convivencia, como son Justicia y Paz, Cáritas, SOS Racismo o Braval, contemplan estos días atónicos como en precampaña electoral las formaciones políticas hacen un uso partidista del fenómeno migratorio.
Algunos de forma escandalosa, otros de forma más sutil ... pero todos los políticos hablan sin ofrecer ningún tipo de propuesta y la mayoría desde el desconocimiento, según se quejan estas asociaciones.
Algunos de forma escandalosa, otros de forma más sutil ... pero todos los políticos hablan sin ofrecer ningún tipo de propuesta y la mayoría desde el desconocimiento, según se quejan estas asociaciones.
Uno de los puntos del Pacto Nacional para la Inmigración, firmado en diciembre de 2008 sólo con las rúbricas de los tres socios de gobierno y diversos agentes sociales, establecía en un polémico punto que la inmigración no podía convertirse en una arma electoral. Ha comenzado la precampaña y uno de los partidos que se negaron a firmarlo, el Partido Popular, ha puesto el tema sobre la mesa.
A partir de este hecho, el resto de partidos, a pesar de parecer incómodos con la temática, se han visto obligados a incorporarse a la dialéctica. Es decir, si realmente el PSC propuso al resto de formaciones que firmaran un documento en el que se comprometían a no hablar de inmigración durante la campaña, tal y como ha denunciado Ciudadanos, parece obvio que no fue aceptado. "De silencio nada de nada, todos hablan y todos, directa o indirectamente, utilizan la inmigración para beneficio propio", afirma el jefe del Área de Inmigración de Cáritas Diocesana de Girona, Lluís Puigdemont.
El silencio
Y es que desde las entidades que trabajan junto a los recién llegados recuerdan a las formaciones políticas que el tema de la inmigración no se puede tapar bajo la alfombra. "De la inmigración se ha de hablar, sin miedo, aunque genere enfrentamiento político", advierte el presidente de Braval, Josep Masabeu, "pero las administraciones, sean de un color u otro, no afrontan los problemas". De hecho, como recuerda el responsable de emigración de Justicia y Paz, Eduardo Ibañez, "todos los partidos deberían explicar cómo piensan desarrollar el programa de acogida, la integración y las nuevas competencias".
Pero, además, según Masabeu, cuando se habla no es a fondo: "Se hablan de anécdotas extraídas de contexto, pero no del paro, la escolarización ...". Desde Justicia y Paz se, reconoce que "es un tema difícil de tratar y por eso los políticos no lo ponen sobre la mesa". Ahora bien, también advierten que "para hablar como habla el Partido Popular mejor no hablar".
La propaganda
Y es que según los agentes sociales debatir sobre la inmigración no significa intentar obtener un rédito político. "En vez de promocionar asociaciones que fomentan la integración dan subvenciones a asociaciones formadas por inmigrantes de una única procedencia porque el día que puedan votar los voten a ellos", asegura Masabeu. O, según el responsable de inmigración de Cáritas de Girona, se dedican a clasificar los inmigrantes entre "los de primera, los hispanos, y los de segunda, los magrebíes", en referencia a las palabras de la líder de los populares, Alicia Sánchez Camacho.
De hecho las críticas más severas se las lleva esta formación. "El trato que ha hecho sobre la inmigración el PP es impresentable y fomenta el rechazo", declara Ibañez. Una manera de hacer que desde SOS Racismo se observa con preocupación: "La idea de coger votos con la inmigración es muy golosa y ahora también se extiende por partidos con tradición democrática", avisa José Peñín, portavoz de la entidad . Y aunque avisa: "Estos mensajes, más allá de las elecciones, provocan fractura social".
La realidad
Y es que al final, según las asociaciones, entre palabras vacías y propaganda, de propuestas muy pocas. "No sentimos ninguna propuesta coherente o que por nosotros sea responsable, las únicas propuestas claras son las del PP y no nos gustan", dicen desde SOS Racismo. Y es que después de quejarse aún deben recibir los políticos que en campaña se interesan por sus proyectos cuando el resto del año "desde sus despachos se desconectan de la realidad". En este sentido, concluye el presidente de Braval, "nos sentimos manipulados".
A partir de este hecho, el resto de partidos, a pesar de parecer incómodos con la temática, se han visto obligados a incorporarse a la dialéctica. Es decir, si realmente el PSC propuso al resto de formaciones que firmaran un documento en el que se comprometían a no hablar de inmigración durante la campaña, tal y como ha denunciado Ciudadanos, parece obvio que no fue aceptado. "De silencio nada de nada, todos hablan y todos, directa o indirectamente, utilizan la inmigración para beneficio propio", afirma el jefe del Área de Inmigración de Cáritas Diocesana de Girona, Lluís Puigdemont.
El silencio
Y es que desde las entidades que trabajan junto a los recién llegados recuerdan a las formaciones políticas que el tema de la inmigración no se puede tapar bajo la alfombra. "De la inmigración se ha de hablar, sin miedo, aunque genere enfrentamiento político", advierte el presidente de Braval, Josep Masabeu, "pero las administraciones, sean de un color u otro, no afrontan los problemas". De hecho, como recuerda el responsable de emigración de Justicia y Paz, Eduardo Ibañez, "todos los partidos deberían explicar cómo piensan desarrollar el programa de acogida, la integración y las nuevas competencias".
Pero, además, según Masabeu, cuando se habla no es a fondo: "Se hablan de anécdotas extraídas de contexto, pero no del paro, la escolarización ...". Desde Justicia y Paz se, reconoce que "es un tema difícil de tratar y por eso los políticos no lo ponen sobre la mesa". Ahora bien, también advierten que "para hablar como habla el Partido Popular mejor no hablar".
La propaganda
Y es que según los agentes sociales debatir sobre la inmigración no significa intentar obtener un rédito político. "En vez de promocionar asociaciones que fomentan la integración dan subvenciones a asociaciones formadas por inmigrantes de una única procedencia porque el día que puedan votar los voten a ellos", asegura Masabeu. O, según el responsable de inmigración de Cáritas de Girona, se dedican a clasificar los inmigrantes entre "los de primera, los hispanos, y los de segunda, los magrebíes", en referencia a las palabras de la líder de los populares, Alicia Sánchez Camacho.
De hecho las críticas más severas se las lleva esta formación. "El trato que ha hecho sobre la inmigración el PP es impresentable y fomenta el rechazo", declara Ibañez. Una manera de hacer que desde SOS Racismo se observa con preocupación: "La idea de coger votos con la inmigración es muy golosa y ahora también se extiende por partidos con tradición democrática", avisa José Peñín, portavoz de la entidad . Y aunque avisa: "Estos mensajes, más allá de las elecciones, provocan fractura social".
La realidad
Y es que al final, según las asociaciones, entre palabras vacías y propaganda, de propuestas muy pocas. "No sentimos ninguna propuesta coherente o que por nosotros sea responsable, las únicas propuestas claras son las del PP y no nos gustan", dicen desde SOS Racismo. Y es que después de quejarse aún deben recibir los políticos que en campaña se interesan por sus proyectos cuando el resto del año "desde sus despachos se desconectan de la realidad". En este sentido, concluye el presidente de Braval, "nos sentimos manipulados".
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