La crisis aumenta las tensiones racistas en Lérida
El racismo es amigo de la crisis económica, especialmente en las sociedades que conviven con diversidad de etnias y culturas. Así es como el Grupo de Investigación Interculturaldad y Desarrollo (GRID) de la Universidad de Lérida (UdL) ha detectado que la situación económica está ocasionando un aumento de las tensiones racistas.
Explica el profesor del Departamento de Geografía y Sociología de la UdL, Jordi Garreta, que el primer informe del GRID sobre la inmigración en las comarcas de Lleida revela un incremento del número de inmigrantes sin aumentar los recursos necesarios. Esto falta de inversión ha colapsado muchos servicios y existen carencias notables, especialmente en los campos de la educación, la sanidad y los servicios sociales.
Las conclusiones del estudio apuntan que los inmigrantes sirven de 'chivo expiatorio' de estas deficiencias en la atención a los usuarios y que los autóctonos de nivel socioeconómico más bajo piensan que reciben las consecuencias de la competencia laboral y de los bajos salarios. "Una percepción que se ha incrementado con la actual crisis económica, así como también han crecido las actitudes racistas", concretó ayer Jordi Garreta.
El GRID, liderado por Garreta, coordinará el Observatorio para la Inmigración que promueve el Instituto de Estudios Ilerdencs (IEI), que depende de la Diputación. Garreta pretende analizar la inmigración desde un punto de vista académico, dinamizando el intercambio de experiencias entre instituciones, entidades y asociaciones que trabajan estos temas.
El objetivo es crear una base de datos fiable y completa de la situación de los inmigrantes en la provincia para después diseñar estudios específicos para que el Observatorio sea un referente en el debate sobre las políticas y estrategias de intervención en materia de inmigración a las comarcas leridanas.
El rector de la UdL, Joan Viñas, y el presidente de la Diputación de Lérida, Jaume Gilabert, presentaron ayer la iniciativa en un acto al que también asistió el director del IEI, Joan Busqueta.
Explica el profesor del Departamento de Geografía y Sociología de la UdL, Jordi Garreta, que el primer informe del GRID sobre la inmigración en las comarcas de Lleida revela un incremento del número de inmigrantes sin aumentar los recursos necesarios. Esto falta de inversión ha colapsado muchos servicios y existen carencias notables, especialmente en los campos de la educación, la sanidad y los servicios sociales.
Las conclusiones del estudio apuntan que los inmigrantes sirven de 'chivo expiatorio' de estas deficiencias en la atención a los usuarios y que los autóctonos de nivel socioeconómico más bajo piensan que reciben las consecuencias de la competencia laboral y de los bajos salarios. "Una percepción que se ha incrementado con la actual crisis económica, así como también han crecido las actitudes racistas", concretó ayer Jordi Garreta.
El GRID, liderado por Garreta, coordinará el Observatorio para la Inmigración que promueve el Instituto de Estudios Ilerdencs (IEI), que depende de la Diputación. Garreta pretende analizar la inmigración desde un punto de vista académico, dinamizando el intercambio de experiencias entre instituciones, entidades y asociaciones que trabajan estos temas.
El objetivo es crear una base de datos fiable y completa de la situación de los inmigrantes en la provincia para después diseñar estudios específicos para que el Observatorio sea un referente en el debate sobre las políticas y estrategias de intervención en materia de inmigración a las comarcas leridanas.
El rector de la UdL, Joan Viñas, y el presidente de la Diputación de Lérida, Jaume Gilabert, presentaron ayer la iniciativa en un acto al que también asistió el director del IEI, Joan Busqueta.
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