La contratación de inmigrantes en origen cae en picado
Sólo 6.900 fueron contratados por esa vía entre enero y marzo
El Gobierno tramitó en el primer trimestre de 2009 algo más de 6.900 contratos en origen para inmigrantes, una cifra sensiblemente inferior a la registrada en 2008 y que seguirá su tendencia a la baja a lo largo de los próximos meses, según explicó la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí.
Aunque el Ministerio de Trabajo no dispone de un desglose trimestral de los datos de contratación en origen de 2008, la percepción es de un descenso muy acusado porque a 31 de julio de aquel año se había empleado ya a 88.180 extranjeros por esta vía. En diciembre del mismo año, la cifra ascendió a 136.604 contratos estables por cuenta ajena ofrecidos desde España. En 2007, fueron 200.000.
Según afirmó, "la contratación en origen está descendiendo por la crisis económica y será en 2009 cuando más se note" porque aunque algunos sectores "siguen y seguirán" necesitando mano de obra extranjera, "sólo se recurrirá" a ella "cuando la demanda interna no pueda ser atendida".
Sobre este asunto, apuntó que en la actualidad "sigue habiendo demanda incluso en empleos de baja cualificación", entre los que apuntó los sectores de vigilancia, almacenaje, geriatría y dependencia, servicio doméstico, electricidad, informática, personal sanitario, energías renovables y sectores económicos emergentes.
Rumí, que participó en la presentación del informe 'Inmigración y mercado de trabajo 2009' elaborado por el antropólogo social Miguel Pajares, incidió en este dato, porque supuso un descenso en 50.000 nuevas autorizaciones inciales de residencia y trabajo en el lapso de un año.
En este sentido, el experto apuntó que la población inmigrante en España podría haberse reducido más de lo que indican las estadísticas, especialmente el Padrón, por las dificultades que conlleva registrar los retornos, especialmente en el ámbito de la población procedente de países miembros de la Unión Europea, que no tienen obligación de renovar su inscripción anualmente.
"Se ha dicho que ha habido un incremento de más de 330.000 personas extranjeras en 2008. Yo, como analista, creo que no ha habido tal incremento porque no detectamos bien a los que se van, y mi investigación me hace pensar que se ha ido mucha gente", apuntó Pajares.
No obstante, el grueso de las personas que han abandonado España no lo han hecho mediante los programas de retorno asistido que facilita el Gobierno. Por el Plan de Retorno Voluntario han salido del país 6.000 personas desde noviembre y según el experto "no será la solución al desempleo porque no se irán tantos" como para que descienda notoriamente la tasa de parados.
"El retorno asistido es una posibilidad pero no se percibe ni es un mecanismo para resolver la crisis, porque su impacto será siempre limitado", apostilló Rumí, para incidir en que la movilidad y la formación sí que son las vías de solución al desempleo mediante la recolocación de los parados.
Según cifras del Ministerio de Trabajo e Inmigración, desde que el Real Decreto de Retorno Voluntario entrara en vigor el pasado 12 de noviembre, un total de 5.088 extranjeros han solicitado acumular el paro y de ellos, 3.977 lo han conseguido. Además, con ellos se marcharon sus familiares, que en este periodo ascendieron a 2.100 personas.
ep
El Gobierno tramitó en el primer trimestre de 2009 algo más de 6.900 contratos en origen para inmigrantes, una cifra sensiblemente inferior a la registrada en 2008 y que seguirá su tendencia a la baja a lo largo de los próximos meses, según explicó la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí.
Aunque el Ministerio de Trabajo no dispone de un desglose trimestral de los datos de contratación en origen de 2008, la percepción es de un descenso muy acusado porque a 31 de julio de aquel año se había empleado ya a 88.180 extranjeros por esta vía. En diciembre del mismo año, la cifra ascendió a 136.604 contratos estables por cuenta ajena ofrecidos desde España. En 2007, fueron 200.000.
Según afirmó, "la contratación en origen está descendiendo por la crisis económica y será en 2009 cuando más se note" porque aunque algunos sectores "siguen y seguirán" necesitando mano de obra extranjera, "sólo se recurrirá" a ella "cuando la demanda interna no pueda ser atendida".
Sobre este asunto, apuntó que en la actualidad "sigue habiendo demanda incluso en empleos de baja cualificación", entre los que apuntó los sectores de vigilancia, almacenaje, geriatría y dependencia, servicio doméstico, electricidad, informática, personal sanitario, energías renovables y sectores económicos emergentes.
Rumí, que participó en la presentación del informe 'Inmigración y mercado de trabajo 2009' elaborado por el antropólogo social Miguel Pajares, incidió en este dato, porque supuso un descenso en 50.000 nuevas autorizaciones inciales de residencia y trabajo en el lapso de un año.
En este sentido, el experto apuntó que la población inmigrante en España podría haberse reducido más de lo que indican las estadísticas, especialmente el Padrón, por las dificultades que conlleva registrar los retornos, especialmente en el ámbito de la población procedente de países miembros de la Unión Europea, que no tienen obligación de renovar su inscripción anualmente.
"Se ha dicho que ha habido un incremento de más de 330.000 personas extranjeras en 2008. Yo, como analista, creo que no ha habido tal incremento porque no detectamos bien a los que se van, y mi investigación me hace pensar que se ha ido mucha gente", apuntó Pajares.
No obstante, el grueso de las personas que han abandonado España no lo han hecho mediante los programas de retorno asistido que facilita el Gobierno. Por el Plan de Retorno Voluntario han salido del país 6.000 personas desde noviembre y según el experto "no será la solución al desempleo porque no se irán tantos" como para que descienda notoriamente la tasa de parados.
"El retorno asistido es una posibilidad pero no se percibe ni es un mecanismo para resolver la crisis, porque su impacto será siempre limitado", apostilló Rumí, para incidir en que la movilidad y la formación sí que son las vías de solución al desempleo mediante la recolocación de los parados.
Según cifras del Ministerio de Trabajo e Inmigración, desde que el Real Decreto de Retorno Voluntario entrara en vigor el pasado 12 de noviembre, un total de 5.088 extranjeros han solicitado acumular el paro y de ellos, 3.977 lo han conseguido. Además, con ellos se marcharon sus familiares, que en este periodo ascendieron a 2.100 personas.
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