un vistazo previo a Corbacho
La ciudad de l´Hospitalet fue la vitrina para que Celestino Corbacho, recién nombrado Ministro de Trabajo e Inmigración, aplicara una particular forma de gestionar la inmigración que luego ha sido modelo para otras ciudades catalanas. Y desde ahora, podrían tomarse en cuenta para la gestión de la diversidad en toda España.
A menos de una semana de su nombramiento, diversas entidades han reaccionado ante su discurso, especialmente sobre la propuesta de repatriar a los extranjeros en el paro. Pero Corbacho también cuenta con una experiencia que valdría la pena tomar en cuenta.
Un reportaje del diario La Vanguardia, da cuenta de las políticas aplicadas en l´Hospitalet en diversas áreas. Como la seguridad, que fue una de sus prioridades, con el despliegue de 300 Mossos d´Esquadra en el 2.003 y 70 uniformados de la Policía, así como la creación de una unidad de la Guardia Urbana, de 31 agentes, generalmente de paisanos, patrullando la ciudad las 24 horas. Estos últimos se encargan de mediar en los conflictos vecinales.
La mayoría de éstos últimos se produce por el alto volumen de la música en reuniones o celebraciones, por lo cual el ayuntamiento en su momento creó la ordenanza de civismo por la que se multa a una persona hasta con 600 euros si el ruido llega a la calle. Esta sirvió para inspirar una similar en Barcelona.
El control del empadronamiento fue otra medida aplicada. Además del contrato o título de propiedad, el consistorio exige que el piso disponga de diez metros cuadrados para cada habitante. Además, las autoridades se reservan el derecho de verificar que en un piso no hay puertas con candados y comprobar el número de televisores.
Los locutorios, lugar de encuentro por antonomasia de los inmigrantes en España, tuvieron que limitarse a 60 metros cuadrados como mínimo y una distancia de 300 metros de distancia entre cada uno. Además, se les prohibió la venta de comidas y bebidas. Y los jóvenes, desde hace pocos meses, ahora pueden aprovechar los espacios deportivos de los centros educativos en los días festivos. Así evitan tener que practicar deportes en parques y plazas no apropiadas para ello.
A menos de una semana de su nombramiento, diversas entidades han reaccionado ante su discurso, especialmente sobre la propuesta de repatriar a los extranjeros en el paro. Pero Corbacho también cuenta con una experiencia que valdría la pena tomar en cuenta.
Un reportaje del diario La Vanguardia, da cuenta de las políticas aplicadas en l´Hospitalet en diversas áreas. Como la seguridad, que fue una de sus prioridades, con el despliegue de 300 Mossos d´Esquadra en el 2.003 y 70 uniformados de la Policía, así como la creación de una unidad de la Guardia Urbana, de 31 agentes, generalmente de paisanos, patrullando la ciudad las 24 horas. Estos últimos se encargan de mediar en los conflictos vecinales.
La mayoría de éstos últimos se produce por el alto volumen de la música en reuniones o celebraciones, por lo cual el ayuntamiento en su momento creó la ordenanza de civismo por la que se multa a una persona hasta con 600 euros si el ruido llega a la calle. Esta sirvió para inspirar una similar en Barcelona.
El control del empadronamiento fue otra medida aplicada. Además del contrato o título de propiedad, el consistorio exige que el piso disponga de diez metros cuadrados para cada habitante. Además, las autoridades se reservan el derecho de verificar que en un piso no hay puertas con candados y comprobar el número de televisores.
Los locutorios, lugar de encuentro por antonomasia de los inmigrantes en España, tuvieron que limitarse a 60 metros cuadrados como mínimo y una distancia de 300 metros de distancia entre cada uno. Además, se les prohibió la venta de comidas y bebidas. Y los jóvenes, desde hace pocos meses, ahora pueden aprovechar los espacios deportivos de los centros educativos en los días festivos. Así evitan tener que practicar deportes en parques y plazas no apropiadas para ello.
