Casi la mitad de los españoles piden preferencia ante los extranjeros
Para cubrir un puesto de trabajo en un contexto de crisis económica, deberían seleccionarse trabajadores españoles. Eso es lo que piensa casi la mitad de la población (45 por ciento) de los españoles, frente a un 35 por ciento que no está de acuerdo con esa afirmación, según el Barómetro del Real Instituto Elcano (BRIE) del pasado mes de junio, publicado este martes.
Javier Noya, investigador principal del Real Instituto Elcano, afirmó durante la presentación del Barómetro que esto se debe probablemente a la percepción aguda de la crisis económica. En cambio, en un aspecto como que los extranjeros puedan votar en elecciones españolas, la mayoría (42 por ciento) se muestra a favor, mientras que un 35 por ciento se opone.
EN CONTRA DEL VELO
Por otro lado, el sondeo indica que casi dos de cada tres españoles (el 60 por ciento) están en contra de que las niñas musulmanas puedan llevar velo en los centros educativos públicos y que, sin embargo, sólo el 30 por ciento rechaza la exhibición de crucifijos en las escuelas públicas. No obstante, esto no se traduce en una mayor aceptación de los crucifijos, ya que hay un 34 por ciento que sí está a favor pero a otro tercio este tema le es indiferente.
Noya explicó que el porcentaje de rechazo al velo islámico ha aumentado significativamente últimamente, en parte como consecuencia de las noticias sobre las prohibiciones en algunos ayuntamientos y comunidades autónomas. En cualquier caso, también ha disminuido (12 puntos) la aprobación con que cuenta la exhibición de los crucifijos.
Quienes se posicionan en contra del velo y del crucifijo suman un 22 por ciento, el mismo porcentaje que los que se oponen al velo pero no al crucifijo. Los dos grupos minoritarios son los formados por quienes aprueban el velo pero no la cruz (5 por ciento) y los que aceptan que se muestren ambos (8 por ciento), mientras que la mayoría, el 43 por ciento, no tiene una opinión formada.
La conclusión, según Noya, es que "no aumenta la islamofobia, sino el laicismo", y que quienes no tienen opinión acaban adoptando la de determinados políticos, es decir, se posicionan en contra del velo.
Entre los votantes del PSOE y del PP hay claras diferencias en todas estas cuestiones de las que deriva, según el BRIE, que "los conservadores son más intolerantes con la inmigración que los progresistas".
Los votantes del PSOE que consideran que se debe favorecer a los españoles frente a los extranjeros en el mundo laboral son un 40 por ciento, frente al 56 por ciento entre los del PP. En cuanto a que los extranjeros puedan votar en las elecciones españolas, los porcentajes son del 54 y el 33 por ciento, respectivamente; en cuanto a la aceptación de la exhibición de los crucifijos, un 24 y un 51; y en cuanto a que las niñas musulmanas puedan llevar el velo, un 18 y un 6.
La encuesta se realizó telefónicamente del 27 de mayo al 18 de junio a 1.200 personas mayores de edad de todo el territorio nacional y tiene un error de más o menos 2,9 puntos porcentuales y un intervalo de confianza del 95,5.
EP
Javier Noya, investigador principal del Real Instituto Elcano, afirmó durante la presentación del Barómetro que esto se debe probablemente a la percepción aguda de la crisis económica. En cambio, en un aspecto como que los extranjeros puedan votar en elecciones españolas, la mayoría (42 por ciento) se muestra a favor, mientras que un 35 por ciento se opone.
EN CONTRA DEL VELO
Por otro lado, el sondeo indica que casi dos de cada tres españoles (el 60 por ciento) están en contra de que las niñas musulmanas puedan llevar velo en los centros educativos públicos y que, sin embargo, sólo el 30 por ciento rechaza la exhibición de crucifijos en las escuelas públicas. No obstante, esto no se traduce en una mayor aceptación de los crucifijos, ya que hay un 34 por ciento que sí está a favor pero a otro tercio este tema le es indiferente.
Noya explicó que el porcentaje de rechazo al velo islámico ha aumentado significativamente últimamente, en parte como consecuencia de las noticias sobre las prohibiciones en algunos ayuntamientos y comunidades autónomas. En cualquier caso, también ha disminuido (12 puntos) la aprobación con que cuenta la exhibición de los crucifijos.
Quienes se posicionan en contra del velo y del crucifijo suman un 22 por ciento, el mismo porcentaje que los que se oponen al velo pero no al crucifijo. Los dos grupos minoritarios son los formados por quienes aprueban el velo pero no la cruz (5 por ciento) y los que aceptan que se muestren ambos (8 por ciento), mientras que la mayoría, el 43 por ciento, no tiene una opinión formada.
La conclusión, según Noya, es que "no aumenta la islamofobia, sino el laicismo", y que quienes no tienen opinión acaban adoptando la de determinados políticos, es decir, se posicionan en contra del velo.
Entre los votantes del PSOE y del PP hay claras diferencias en todas estas cuestiones de las que deriva, según el BRIE, que "los conservadores son más intolerantes con la inmigración que los progresistas".
Los votantes del PSOE que consideran que se debe favorecer a los españoles frente a los extranjeros en el mundo laboral son un 40 por ciento, frente al 56 por ciento entre los del PP. En cuanto a que los extranjeros puedan votar en las elecciones españolas, los porcentajes son del 54 y el 33 por ciento, respectivamente; en cuanto a la aceptación de la exhibición de los crucifijos, un 24 y un 51; y en cuanto a que las niñas musulmanas puedan llevar el velo, un 18 y un 6.
La encuesta se realizó telefónicamente del 27 de mayo al 18 de junio a 1.200 personas mayores de edad de todo el territorio nacional y tiene un error de más o menos 2,9 puntos porcentuales y un intervalo de confianza del 95,5.
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