Advierten de la alta concentración de inmigrantes en los colegios
Que termine la segregación escolar entre los menores de origen extranjero y los nacidos en Cataluña, es el mensaje que el Sindic de Greuges (Defensor del Pueblo) dio en el vigésimo aniversario de la Convención sobre Derechos del Niño de las Naciones Unidas. El Sindic Rafael Ribó, ha acogida las denuncias principalmente de Sos Racisme, por el funcionamiento de las aulas de acogida para inmigrantes en Vic y Reus. Un "serio problema" al que se enfrenta el "derecho de igualdad de oportunidades de los menores".
En sus declaraciones el Sindic no ahorró críticas al asegurar que "la sociedad todavía no ha asumido que los menores son sujetos de derechos y deberes y deben ser escuchados para que participen en la toma de decisiones".
La concentración de alumnos extranjeros en las aulas es un fenómeno que se ha agravado en Cataluña. Es una "tendencia errónea que dificulta el futuro del país" que el hayan centros-gueto, mientras en el mismo barrio haya otras escuelas con una situación contraria. El 83% de los inmigrantes acuden a centros públicos.
Como ejemplo de buenas prácticas, Ribó se refirió al caso de San Celoni (Vallès Oriental). Ahí las escuelas concertadas (privadas con subvenciones públicas) acordaron aceptar a cuatro alumnos con necesidades especiales (incluidos inmigrantes) por cada aula. Cuando llega un nuevo curso, los distintos centros se los reparten aún cuando esté iniciado el periodo escolar. Por su parte la Policía comprueba que los empadronamientos no sean falsos, para evitar los casos en que se realizan registros no reales para acceder a una plaza determinada.
En sus declaraciones el Sindic no ahorró críticas al asegurar que "la sociedad todavía no ha asumido que los menores son sujetos de derechos y deberes y deben ser escuchados para que participen en la toma de decisiones".
La concentración de alumnos extranjeros en las aulas es un fenómeno que se ha agravado en Cataluña. Es una "tendencia errónea que dificulta el futuro del país" que el hayan centros-gueto, mientras en el mismo barrio haya otras escuelas con una situación contraria. El 83% de los inmigrantes acuden a centros públicos.
Como ejemplo de buenas prácticas, Ribó se refirió al caso de San Celoni (Vallès Oriental). Ahí las escuelas concertadas (privadas con subvenciones públicas) acordaron aceptar a cuatro alumnos con necesidades especiales (incluidos inmigrantes) por cada aula. Cuando llega un nuevo curso, los distintos centros se los reparten aún cuando esté iniciado el periodo escolar. Por su parte la Policía comprueba que los empadronamientos no sean falsos, para evitar los casos en que se realizan registros no reales para acceder a una plaza determinada.
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